Habitación de: Paz Gauthier y Lilah Baudelaire

No.....-deja su celular botado en la cama de Lilah y va con ella.

Lo observa con una mirada un tanto curiosa, pero prefiere no cuestionarle nada ahora.

El celular vuelve a sonar y lo ignora como si ese icesante y molesto ruido no estuviera ahi.
La besa al llegar donde ella.

Le corresponde con una suavidad propia, pero sin ser ella realmente. El puede que lo note, pero ella no se da cuenta.

Se despega de esos labios apenas siente que no es ella otra vez.

- ¿Qué sucede? - Pregunta en un susurro.

Nada......-la mira a los ojos y luego empieza a vestirse.- cuando vuelva Paz avisale que la estoy buscando.
Es asi de cruel por que detesta esos cambios repentinos que no puede entender

- No te entiendo.. - Susurra sin inmutarse ante lo que el le dice, pasiva.

no, no creo que lo hagas.- murmura al aire, frio.
Se calza y camina ala puerta , totalmente vestido

- Koda - Lo llama tranquila colocándose su ropa interior sin prisa alguna. No puede negar que está algo extrañada por su comportamiento.

Qué?.-pregunta simple dandole la espalda aun.

- ¿Qué es lo que te sucede? - Le pregunta directa sin darse cuenta de que él es quien debería preguntarle eso a ella.

A mi nada, a ti sí ....-al aire, distraido

- No sigas con eso! Tu estás terriblemente extraño conmigo y no entiendo porqué - Se levanta, caminando hasta la ventana, sin mirarlo.

No va a seguir discutiendo por algo sin sentido ya.

Suspira, sentándose en la silla en la cual él estaba anteriormente, cansada. Puede que sea raro, puede que no. No le habla.

Suspira pesado sin decir nada más ya.
No entiende esos cambios de animo de ella.
Algo andaba mal entre ellos. Siempre terminaban peliando por algo
Sale de alli.

Se queda con su mirada perdida varios segundos. Se levanta, dirigiendose al baño. Se ducha, se viste y sale de allí.