Habitación de: Paz Gauthier y Lilah Baudelaire

Se convence de que no va a contarle, o trata de hacerlo almenos. Se va durmiendo de a poco, gracias al repentino cansancio y las caricias de el.

Te amo, pequeña .....-murmura de la nada, sin dejar de acariciar su suave cintura

- Yo a tí.. - Susurra casi inaudible, con voz cansada.

El hecho era que no podia sorportar la idea de que ella quedara embarazada.
Seria la estupidez más grande de todas por no cuidarla.

Se abraza suavemente a él como su oso de peluche, cansada. Raramente está más pálida de lo normal, aunque ella no se de cuenta.

Besa su frente mirandola dormir.
Acaricia sus pechos y cintura, recorriendo su cuerpo con caricias.

Se queda placidamente dormida, cómoda con el, con sus caricias y con el momento de tranquilidad que ahora puede tener.

Se detiene en su vientre, sintiendose raro alli.

Siente su cuerpo estremecerse muy suavemente, sigue durmiendo.

Se mete bajo las sabanas y se desliza por la sabana hasta quedar frente a su vientre. Lo mira un buen rato

Ni siquiera se mueve, solo sigue en lo suyo. Está cansada, muy.

Joder!.- exclama frunciendo el ceño y haciendo una mueca.
Vuelve a su posicion inicial.

Se remueve muy suavemente, apenas.

La tapa bien y se levanta.
Camina ahsta la ventana y se queda alli lo que resta de la noche

Siente los rayos del sol molestarle en el rostro, pero sigue durmiendo, como si nada.

Se queda mirando el exterior todas esas horas sin notarsele cansancio.

Raramente no quiere seguir durmiendo. Se despierta, sin abrir sus ojos aún.

Sacude la cabeza cuando siente un rayo de luz darle de lleno en la cara.

Entreabre sus ojos un poco, adormilada. Parpadea suavemente varias veces, niña. En ésta ocasión seguiría durmiendo, pero no lo hace.

Golpetea el borde la ventana al son de una melodia mas calmado ahora.
No seda cuenta de que ella despertó

Se sienta en la cama a medias, cansada. Bosteza sonora, perezosa.

Gira un poco la cabeza, sonrie de costado, apenas y luego vuelve su vista a donde estaba.

Se restriega los ojos con una suavidad impecable. Puede dormir todo el día, pero aún así tendrá sueño.

Su movil suena y suena y solamente mira la pantalla y no contesta.Se hace el idiota

- ¿No vas a contestar? - Pregunta con voz cansada, tratando de enfocar su mirada en el. No se cubre, no tiene más que ocultar ahora.