Habitación de: Paz Gauthier y Lilah Baudelaire

Se encoge leve de hombros, tranquila. Siente un viento frio chocar contra su cuello, en ese mismo segundo se da cuenta de la única toalla que la cubre. Se sonroja levemente apenas, mirando para cualquier lado ahora.

La mira de arriba a bajo sin disimular.

Ni cuenta se da de como la mira, o eso parece. Frunce apenas los labios. - ¿Te.. dejo que sigas pensando? - Pregunta sin mirarlo, cuando en realidad tiene que ser al contrario.

Niega distraido, mirandola
Despues de algunos segundos toca tierra.- no, ya me voy .....-murmura caminando a la puerta.
Choca con ella al pasar por su lado

Su toalla se afloja un poco sin dejar demasiado a la vista pero si lo suficiente para que ella se sonroje un poco más. No está nerviosa por la situación, pero tampoco hace como si nada. Se acomoda la toalla después de unos segundos sin darse cuenta.

Alcanza a ver algo, por minimo que sea.
Desvia la vista al instante, haciendose el tonto

- ¿Pasa algo? - Pregunta con toda tranquilidad, ahora minimamente divertida.

no que va.- miente descarado

Lleva una mano a su mentón, haciendo que la mire, con total suavidad y una sensualidad no intencional. - ¿Seguro? - Tranquila, sosteniendose la toalla con la otra mano.

Niega con la vista fija en la aprte superior de su toalla.
No era de fierro.

No sabe si tomarse ese gesto como: No, no está seguro o un No, no pasa nada. En fin, prefiere no insistir demasiado. Baja apenas su mano dejandola en su cuello, por puro instinto, ahora llevando su mirada ahí.

Debe encerrar a al bestia sexual antes de que se el escape. Otra vez.

Baja el dedo indice por su cuello, muy despacio. No puede evitarlo, es un pequeño impulso y ahora no quiere separarse.

Saca su mano de alli, despacio.- es mejor que ....ahora no......-mrmura. Besa su mejilla.
No era tiempo, no aun.
Si el volvia a hacer eso con ella no quiere que sea por impulso y por calentura.

Sonrie de medio lado, demasiado tranquila. - Claro.. - Murmura, con voz suave, melódica inclusive.

El agua esta helada.- comenta al pasar, saliendo de ahi

Frunce los labios, ahora abre el grifo del agua caliente. Deja la toalla por ahí, suponiendo que el ya se fué. Ingresa a la ducha, calma.

Busca por su habitacion su morral, distraido

La puerta abierta, cerrada o entre-abierta. Ni siquiera se fijó en eso y poco le importa. Lilah no llegaría hasta la noche y nadie iba a su habitación la mayoria del tiempo. Cierra los ojos una vez empapada, excepto por su cabello el cual se está soltando ahora.

Encuentra su morral y debajo de eso un par de cigarrillos.
Frunce el ceño

Enjabona su cuello delicada, cuidadosa. Tiene demasiado tiempo de sobra y el agua, no la paga ella. Distraída.

Entra sin perder tiempo. Ruidoso.
Bota los cigarrillos al WC. Sin decir una sola palabra

Frunce leve el ceño, dejando caer el jabón al piso, en la ducha. Se asoma apenas, viendo a Koda allí. - ¿Qué se supone que haces? - No alcanza a ver lo que tira, pero no se anima a preguntarle solo por las dudas aunque la curiosidad la carcome por dentro.

Te dije que no lo hicieras.......-murmura mostrandole uno de los cigarrillos
El no ra nadie para regañarla pero se creia con el derecho.
No le gusta que le mientan.

El agua sigue corriendo y ella está pensando en alguna buena excusa que pueda zafarla. Quiere salir pero... no está en condiciones. - Alguien me los dió pero juro que iba a tirarlos luego.. - Porque ya fumó unos anteriormente y por suerte nadie lo sabía, así que podía tirarlos y que nadie se enterara. Hasta ahora que el lo sabe.