Mírala bien, ella es la que rompe el suelo y no le importa con quien ♫ [Lilah]

Sabía que esa no era su zona, que tendría que estar en las canchas de baloncesto, pero necesitaba descargarse, y para poder lograrlo necesitaba de la compañía de algún piano. Extrañaba el suyo, pero en ese momento podría utilizar el de la academia.

Buscaba con desesperación un saxo. El suyo estaba en la habitación, y no quería pisar ese lugar hasta dentro de un buen rato. Pasaba por el pasillo de la sala de música, cuando puede escuchar con facilidad aquello. ¿Quién tocaría con tanta perfección el piano si no era él? Sonríe amplia, entrando al lugar.

Escucha que la puerta se abre y alguien entra,pero no voltea. Está demasiado metido en el piano delante de él.

Sonríe amplia al confirmar que es su hermano el que está allí. Camina hacia él silenciosa, tomando asiento a su lado, en el banquito del piano. No dice nada, sólo se limita a mirar las teclas.

Voltea el rostro al sentir como alguien toma asiento a su lado. Esboza una sonrisa amplia al ver a su hermana allí. No dice nada, sólo sigue tocando aquella melodía.

Le regala una de sus sonrisas, quedándose en silencio, respetando a su hermano y su música.

Poco a poco termina su melodía. Se voltea, observando directamente a Lilah. -Te estuve buscando -musita, sonriéndole.

-Y yo a ti, tonto -murmura, abrazándolo sin previo aviso. -Parece que te encontré primero -lo pica, riendo.

La abraza fuertemente contra él, disfrutando de haber encontrado a su hermana de una vez. -Ya estaba pensando que habías engañado a mamá y habías ido a otro lugar -comenta, riendo entre dientes.

-Estuve a punto de hacerlo, creeme -musita con pesar, separándose de su abrazo, apoyando el rostro en su hombro.

-Tonta -murmura entre dientes, acariciando su cabello con lentitud.

Lo golpea levemente en el pecho, jugando con él.

-Cuidado que tienes fuerza, Lil -se burla, riendo entre dientes aún, acariciando su cabello.

-Maldito -musita, sin separarse de él, realmente lo había extrañado.

-Hey, Lilah.. me enterado por ahí, que has vuelto con Brandon -empieza, mirándola fijamente, esperando su reacción. -¿Es cierto eso?

-¿Quién te lo ha dicho? -su reacción de defensa es más que rápida. Sabía que a su hermano no le caía muy bien.'

-Rosalie Jones -responde con simplicidad. -Pero no me has respondido.

-Sí, volví con Rob -confiesa en voz baja, mirándolo de reojo.

-Bien, ese me va a escuchar -es áspero al hablar. Ya había herido por demás a su hermana una vez. Dos no lo dejaría.

-No te va a escuchar, porque no lo irás a buscar -es cortante, y con eso le hace saber que lo impedirá.

-Ya veremos eso -musita con los dientes presionados fuertemente.

Vuelve a pegarle en el pecho, quedándose en silencio.

Toma su puño, acariciándola suavemente. No quería pelear con su hermana, menos en ese momento.

-Braaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaam -lo llama, gritándole en su oído. -Te quiero -susurra niña, sonriéndole amplia.

-Yo te quiero más, pequeña -murmura, besando su cabello. -Pero ten cuidado.